El dolor del pasado no me avergüenza, me ha transformado y conformado en lo que soy. Gracias a quienes me han herido, pues de ahí aprendí a renacer, gracias a quienes han hablado inmundicias escupiendo su veneno con sus lenguas bífidas ¡Pues aun así soy importante para ellos! Ocupan su tiempo en pensar como destruirme ¡No ven que soy ...un roble! Hecha de madera fina. Pobres ilusos que crean estupideces y de ellas florecen, ignorando que mientras más me odien, mas fuerte seré.
El gran final les aguarda, serán muertos por su propio veneno que el vientre les rasgará, una a una sus cuentas pagarán, como serpientes se arrastran y yo… ¡Les pisare la cabeza con la firme elocuencia de la verdad!
No deseo males para nadie, de antemano extiendo mi diestra en señal de perdón pues con la siniestra pagarán.
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