Saqué a relucir en mi alma la calma, ya no siento nada que me lleve a buscarte, sorpresivamente descubro que de haber sido mi todo te has convertido en nada... solo tengo el deseo de encontrar un nuevo amor que me de lo que en ti no pude encontrar.
Rompí miles de veces mis promesas de ya no buscarte perdiendo en mi camino hacia ti mi dignidad, pero hoy mírame de pie sin más búsquedas y así he de permanecer, cumpliendo mi última promesa que solo es para ti.
Pondré las corazas necesarias para no volver a sufrir y cada recuerdo que yo tenga solo será de todo lo malo que viví a tu lado pues son precisamente ellos los que me han otorgado la realidad a mi existir, realidades dolorosas, si, pero fortificantes a la vez.
Romperé las cadenas
que me llevaban a la mar
de nauseabundos recuerdos
que solo cuartaban mi respirar
hacia la libertad de un nuevo amor.
La distancia oculta lo que mi mente grita...
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