Entre tejo en los recovecos de mis palabras cada anhelo, perdonando la flecha que pudo herirme pero permaneciendo firme como el arco con el cual me hirieron. No ha sido mi deseo perder el sentido de mis palabras entre las penumbras de mis dudas y temores.
Anhelo volver a volar, surcar los vientos de tu ser para convertirme en tu reflejo frente al espejo, decirte que siempre estaré ahí con tan solo verte en el, pronta, rauda e irremediablemente junto a ti, adoctrinando nuestro espíritu para converger en un si eterno, reconociéndonos aun con el alma a ciegas por el perfume que del corazón se exhala, de mi boca no brotaran palabras y de mis ojos emanarán lagrimas que han de hablar por mi todo cuanto por ti siento. Si de mi boca dudas, tan solo basta vernos a los ojos para descubrir lo que mi corazón grita desde los lares de mi alma, deseo ser tu único refugio donde desbordes tus ansias locas y tu pasión fortuita, mezcla de fuego ardiente y ternura al llegar al éxtasis al compas que tu corazón nos marque dejándonos tatuados la piel por las uñas del placer.
Triste realidad, sin ti me convertiría en errante de la vida, buscadora de destinos y tan solo en un yo errático y menguado por el dolor.
Te amo, mas pido a dios jamás me canse de hacerlo.
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